Reportaje | Una adicción, la de los psicofármacos, camuflada entre otras

Reportaje | Una adicción, la de los psicofármacos, camuflada entre otras
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Viene incluida dentro del listín de adicciones que tratan desde hace años. Sin embargo, pocos coruñeses saben que los que abusan de los psicofármacos cuentan en Utaca (Unidade de Tratamento do Alcol e Condutas Adictivas), con un apoyo. En parte porque no reconocen que tienen un problema y porque hasta ahora, uno de los tres psicólogos del colectivo, Manuel Lage, asegura que no viene solo. Va asociado al alcoholismo. 
En todo caso, señala que a una media de diez enfermos al año tienen que ingresarlos en el hospital porque requieren una desintoxicación controlada, con fármacos que pueden ser peligrosos. Y es que al ser una droga “legal”, igual que el tabaco y las bebidas alcohólicas, no se la da tanta importancia: “La gente mezcla alcohol y medicamentos creando  una dependencia física muy grave, en algunos casos con alteraciones graves de la conciencia y el delirium tremens, el síndrome de abstinencia que puede provocar la muerte”. 
Es en estos afectados “donde se necesita estar muy encima” y aunque el número de adictos es una proporción pequeña, “el número no le resta importancia”. El especialista indica que los médicos están muy sensibilizados en la prescripción de barbitúricos, pero “siempre está la picaresca” y no es fácil controlar hasta qué punto los pacientes hacen un papel o cambian de doctor para conseguir la receta y aunque hay algunos con un poder leve, otros “son muy adictivos”. 
En este país, Lage recuerda que “se busca la pastilla, una solución fácil” y el remedio pasa por cambios en los hábitos de vida, y por aprender técnicas de relajación para dormir, “cuestiones tan eficaces o más” porque “si yo tengo dolor de cabeza por la tensión alta, igual debo hacer más ejercicio porque es una inversión a largo plazo”. En Utaca, desarrollan mecanismos para combatir las causas de la adicción al alcohol y los ansiolíticos, les enseñan a tolerar el estrés y a rebajar los niveles de ansiedad a través de comportamientos de salud, del ejercicio y la alimentación. Comenta que los trastornos del sueño son muy frecuentes, “una de las causas de que se enganche a cierto tipo de medicación”, pero la psicoterapia y otras técnicas pueden resolver esta alteración. Eso sí, piden un período de adaptación. Entre tanto, la dosis deja de hacer efecto en el organismo y los enfermos buscan subirla para dormir, una pescadilla que se muerde la cola y que se rompe con somníferos naturales. l

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