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jueves | 25 abril | 2024
La UDC, gracias al trabajo realizado por el investigador Bruno Casal, participa en el desarrollo de un instrumento que permitirá evaluar con gran detalle las necesidades concretas de las personas dependientes, lo que será muy útil para poder optimizar los recursos disponibles. Se trata de un cuestionario con preguntas muy concretas dirigidas a las personas afectadas, que servirá para valorar sus preferencias y necesidades en aspectos fundamentales de su día a día. “Es una idea que nace en Reino Unido para la medición de las ganancias de calidad de vida de las personas que requieren cuidados, y ya está implementado en países como Noruega, Dinamarca y Japón, adaptándolo en cada caso a sus poblaciones”, explica Casal, que es el encargado de desarrollar este instrumento para España junto a Eva Rodríguez, investigadora de la Universidad de Vigo.
A través del cuestionario, se busca conocer las preferencias de las personas afectadas en aspectos como la dignidad, la seguridad, tenr control sobre su hogar o el estar bien alimentado, para determinar, con valores numéricos, cuáles de estos aspectos son los que priorizan. “En algunos países, por aspectos culturales, es posible que las personas valoren más, por ejemplo, sentirse seguros que tener un hogar confortable. Por eso, antes de implementar el cuestionario, tenemos que realizar un gran número de encuestas para determinar las preferencias generales de la sociedad española, porque pueden ser diferentes a las de otros países. Y a partir de ahí, se desarrolla el cuestionario”, detalla el investigador.
Pionero en España
“Ahora mismo, no existe en España otro instrumento que traduzca en una medida numérica las ganancias de calidad de vida que proporcionan los cuidados. Y esto es muy importante en numerosos aspectos. Sobre todo, porque permite priorizar y saber en que invertir los recursos disponibles, que deberán invertirse en los aspectos que más ayuden a mejorar la calidad de vida y el bienestar de las personas”, detalla Casal.
“Los beneficiarios directos son todos aquellos organismos, públicos o privados, de ámbito nacional o comunitario, que deseen evaluar el nivel de desempeño de los servicios sociales en diferentes áreas de la calidad de vida. Puede ser utilizado para valorar, tanto los servicios residenciales, como aquellos que se proporcionan en el ámbito domiciliario. También se beneficiarán de este instrumento las propias empresas proveedoras de este servicio, dado que pueden utilizarlo como un instrumento de control interno para valorar la satisfacción de los usuarios”, concluye Casal.
