El proyecto de ampliación del puente de A Pasaxe ha adquirido un ritmo vertiginoso. Al menos en lo que a trámites administrativos se refiere.
Si el pasado día 18 el Ministerio de Transportes anunciaba que se había aprobado, de modo provisional, la primera fase del ensanche del viaducto sobre la ría de O Burgo, ayer la misma entidad gubernamental hacía público, a través del Boletín Oficial de la Provincia (BOP), el expediente de expropiación forzosa de bienes y derechos afectados por esta iniciativa.
Según consta en la publicación de la Diputación son quince los propietarios de terrenos que se ven afectados por la mencionada expropiación. Cuatro en el municipio de A Coruña y los once restantes en el de Oleiros.
Precisamente ambos ayuntamientos también sufrirán menoscabo en sus respectivos patrimonios inmuebles. Así, el Gobierno adquirirá 110,28 metros cuadrados de suelo urbano en el margen coruñés y 1.078,52 en el de Oleiros. El total del terreno expropiado asciende alrededor de los 13.000 metros.
Como es procedente en estos casos, durante el período de información pública, la documentación del proyecto permanecerá expuesta al público en días hábiles y en horario de oficina, en el tablón de anuncios de ambos ayuntamientos y en la sede de la Demarcación de Carreteras del Estado en Galicia, situada en el número 45 de la calle de Antonio Machado.
Precisamente a esta misma sede habrá que remitir o presentar las alegaciones y observaciones que los afectados estimen oportunas.
Presupuesto de licitación
El Ministerio de Transportes indicó, en su momento, que el presupuesto de licitación estimado para esta primera fase supera los 31 millones de euros.
El puente de A Pasaxe constituye para este ministerio una infraestructura fundamental en la movilidad del área metropolitana ya que une los municipios coruñés y oleirense y está situado en la vía AC-12, la arteria de acceso a la ciudad desde la N-VI.
La estructura tiene cuarenta años de antigüedad, una longitud total de 225 metros y cuenta con tres carriles por sentido de circulación para los casi 90.000 vehículos que circulan por ella a diario.
Según fuentes gubernamentales, el proyecto contempla la construcción de una nueva estructura paralela a la existente, en el lado norte, con lo que se pretende incrementar la capacidad y mejorar las condiciones de la explotación de la vía.
Las mismas fuentes añaden que la ampliación de la capacidad del puente y de sus nudos adyacentes beneficiará tanto a la propia AC-12 como a la avenida de Alfonso Molina (AC-11) o a las carreteras autonómicas AC-173 y AC-174, en la zona oleirense.
Cabe recordar que este proyecto se complementa con la construcción de una glorieta y un túnel en Perillo, en concreto, en el cruce de Solymar.