La concejala de Medio Ambiente, Esther Fontán, expresó estos días su preocupación por el avance de la hierba de la pampa, más conocida como plumacho, en el municipio coruñés. Sin embargo, consideró que es poco lo que puede hacer el Gobierno local contra esta especie invasora. “Estoy bastante preocupada, porque es tremendamente difícil de erradicar. La gente cree que es muy bonita, muy ornamental, pero no lo es: lo está fagocitando absolutamente todo”.  

Según Fontán, la única planta gallega que es capaz de resistir su invasión es el tojo. “Pero, claro, aunque es más autóctona, también tiene sus dificultades, porque favorece los incendios”, advierte. Así que el Ayuntamiento está en dificultades: “Todo lo que podamos hacer, más allá de cortar las zonas más cercanas a los ciudadanos, es realmente muy poco”. Debería ser una actuación conjunta con al Xunta, administración que tiene las competencias. “Si hacemos una gran actuación a nivel de la ciudad, pero al llegar a Marineda, más allá, ya es otro ayuntamiento. Las semillas están en la parte del plumacho, con el aire vuela, cae a tierra...”, hace ver la concejala, que considera necesaria una actuación conjunta solo para controlarlo: “Necesitamos una gran inversión”.