Ballesteros de Calatrava marca el camino a seguir

Quédense con el nombre, Ballesteros de Calatrava. Es el pueblo que ha roto las cadenas que nos atan a las eléctricas, un pionero, un visionario que marca el camino para que todos los demás podamos librarnos de una vez por todas de la factura de la luz tal como la conocemos. Esta localidad de Ciudad Real producirá, almacenará y distribuirá energía eléctrica a partir de la fotovoltaica a través de un sistema que hará que fluya por todas sus calles. Un autoabastecimiento de manual. Ellos son cuatrocientos habitantes, nosotros en las ciudades podemos organizarnos por manzanas. Y forrando los tejados con placas solares arreglamos el problema. Bueno, igual no tenemos tanto sol, pero de viento vamos sobrados, colocamos unos molinos y listo. No necesitamos una empresa nacional de energía, necesitamos ser nuestros propios productores. Y qué cosa más bonita para hacer comunidad que las reuniones de control. Hasta se podrían convertir en celebraciones del tiempo que llevásemos liberados de las eléctricas. Es perfecto.