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jueves | 25 abril | 2024
El presidente de Novagalicia Banco, José María Castellano, afirmó ayer que \“la batalla\” para dar entrada a inversores privados en el capital de la entidad mediante un concurso público \“no está ganada, pero sí muy avanzada\”, dado que tanto el Banco de España como el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) \“han entendido\” la propuesta.
Castellano informó de que el Banco de España sabe ya de los cinco inversores que podrían presentarse al concurso y cree que \“tiene viabilidad\”.
Este proceso, que cuenta con dos informes jurídicos externos y la aprobación del FROB, representado en un 90% de la entidad, cuyo consejo de administración aprobó el plan por unanimidad, supondría un \“menor coste social\”, al mantener oficinas y el centro de decisión en Galicia, y también un sentido económico para el Estado.
Los fondos, que inyectarían entre 500 y 1.000 millones en la entidad, han exigido que el FROB o el Fondo de Garantía de Depósitos asuma el 75% de las pérdidas que pueda sufrir la entidad. El banco se haría cargo del 25% restante.
De hecho, durante su comparecencia para presentar los resultados de la entidad en 2011 y explicar sus planes de futuro, Castellano destacó que el FROB sienta a tres representantes en el consejo de administración del banco gallego, que el viernes pasado aprobó \“por unanimidad\” el proyecto remitido al supervisor del sistema financiero. De ello concluye que, en efecto, el FROB respalda esta propuesta, \“sin ningún precedente\”, del concurso público.
El supervisor tiene ahora de plazo hasta el próximo 24 de abril para aceptar, modificar o rechazar esa opción del concurso público.
En concreto, Novagalicia ha propuesto dos opciones: una de ellas pasa por subastar la entidad, como recientemente se ha hecho con la CAM o con Unnim; y la otra, por la que apuesta el banco gallego, supone sacar a concurso público una parte de su capital para que se presenten aquellos inversores interesados, que en principio, serán los cinco fondos.
En ese caso, se harán con hasta un 40% del capital. Actualmente el 90% está en manos del Estado y el porcentaje que controlen los inversores privados no debe superar el 51% para evitar que el FROB tenga que desinvertir, por ley, la totalidad. Ni Castellano ni el consejero delegado, César González-Bueno, adelantaron el porcentaje que quedaría en manos privadas. El plazo con el que trabajan es que esté terminada entre junio y julio.
El presidente destacó que una subasta provocaría la venta de la entidad por un euro. Además, el banco sería adjudicado a otra entidad, con lo que habría un solapamiento de oficinas que conllevaría cierres y despidos.
