La Unión Europea no quiere más coñas con la deriva totalitaria que están tomando determinados países miembro. Por eso, se acaban de dotar de un mecanismo que es capaz de suspender los fondos comunitarios en caso de que en un país se detecten actitudes antidemocráticas. Todo el mundo tiene en mente lo que sucede en Polonia o en Hungría. Sin embargo, la decisión va más allá, al fin y al cabo, a Bruselas no le gustó nada la amenazada de Pedro Sánchez de cambiar el modo de la elección de los miembros del CGPJ. FOTO: Ursula Von der Leyen, Presidenta de la Comisión Europea | aec