Al final lo de siempre triunfa

Los nombres también van por modas. Desde que se dejó de poner el santo del día o de homenajear a los padrinos de la criatura los que mandan son los famosos y las series de televisión. Pasamos de Shakira a Aria, sin olvidarnos de Leo, otro habitual. Aunque, al final, por mucho original que haya por ahí, lo que predomina es lo de toda la vida. En más de media España la mayoría de las niñas se llaman Lucía. Un clásico atemporal. Y casi en el resto, María. Pues eso, para qué se van a complicar más. Mari, Marieta, Marucha, Mery y así las van diferenciando.