Después de que Grande-Marlaska, primero, y Ábalos, después, negaran la posibilidad de que Madrid fuera declarada zona catastrófica por la nevada provocada por el temporal “Filomena”, el Gobierno ha decidido desdecir a sus dos ministros y determina que los madrileños podrán recibir ayudas extraordinarias por los daños ocasionados por la nieve. Es lo que tiene querer ganar puntos ante el jefe y ya se sabe que, a Pedro Sánchez hay pocas cosas que le motiven más que ver sufrir a su particular bicha, la presidenta madrileña, Díaz Ayuso. Sin embargo, nada de culpa tienen los ciudadanos de las filias y las fobias de estos dirigentes que son capaces de negar hasta la ley de la gravedad con tal de contentar al jefe.