Vivir sin los servicios más básicos

Se ha puesto de moda hablar de la España vaciada (que no vacía, aunque el palabro sea mucho más bonito) y en Galicia se sabe mucho de esas aldeas que poco a poco se van quedando sin vecinos. El problema básico es que los servicios que para los urbanitas son naturales, se convierten en una especie de lujo asiático en ese rural tan alejado de comodidades básicas. La visita al médico, hacer la compra o sacar dinero del banco es para demasiados ciudadanos algo muy complicado. Pero hay otras muchas cosas que suenan a inalcanzables. En Galicia, y pese al avance registrado en los últimos años, una de cada cuatro aldeas carece de una conexión básica para que se pueda conectar a internet. Nuestras vidas se han convertido en una sucesión de imágenes y comentarios en redes sociales pero solo para aquellos que habitan en una ciudad. Sin los mismos servicios, es evidente que el rural se seguirá despoblando.