El maestro García Carril

Sobrado dos Monxes honrará el próximo sábado a un hijo predilecto, el compositor y musicólogo Nemesio García Carril, en un acto que organiza la Asociación Cultural Maristela, que preside con acierto Ángeles Sánchez.
El maestro García Carril es un referente musical en la composición y dirección, en la docencia e investigación. Tiene una densa formación adquirida en Galicia, en Salamanca con el profesor Aníbal Sánchez Fraile y en Roma donde “aprendí al lado del maestro Domenico Bertolucci”.
De regreso a España se graduó en el Conservatorio de Madrid, fue maestro capilla en la catedral de Santiago, profesor del Instituto Español de Lisboa y catedrático de Música en el instituto Rosalía Castro y en el Instituto Padre Suárez de Granada desde 1993 hasta su jubilación
Cultivó la mayoría de los géneros y tiene una vasta producción de piezas musicales, todas ellas de gran expresividad y de una belleza singular, siempre con la impronta galaica. En este sentido es preciso decir que muchas obras son menos conocidas porque fueron realizadas a petición de asociaciones con los que siempre colaboró de forma altruista.
De su producción cabe destacar “Catro cancións de Rosalía de Castro” interpretadas por la soprano Maruxa Villanueva y la Orquesta de Radio Nacional de España, y la obra escénica “A nai” que realiza por encargo del Patronato Romaría Internacional y recorrió Galicia, Asturias y León con la orquesta Sinfónica y Coros Basarabia de la Academia de Música de Chisinau de Moldavia y las voces de conocidos intérpretes, como Antón de Santiago.
Pero el nombre del maestro García Carril entró con fuerza en los hogares españoles en los años ochenta del siglo pasado cuando Televisión Española emitió “La hija del mar” de Rosalía Castro y “Los gozos y las sombras”, de Torrente Ballester. Él fue el autor de la banda sonora de estas dos obras de fuerte contenido social y su música contribuyó a entender los entresijos y contrastes de la compleja sociedad rural gallega.
Este músico eminente, que ejerce de gallego, tiene un talento tan excepcional como excepcional es su humildad, que es la gran culpable de que no tenga el reconocimiento que merece en su Galicia y en España.
El homenaje que le tributarán sus paisanos en Sobrado, la Pueblanueva del Conde natal en donde vivió “Los gozos y las sombras” de la infancia y juventud, contribuirá a rescatar del olvido a esta figura singular de la música gallega.