La Audiencia absuelve de un delito de estafa al agente del exdeportivista César Martín

La Audiencia absuelve de un delito de estafa al agente del exdeportivista César Martín
el acusado negaba cualquier fraude al jugador susy suã¡rez

“Sin duda”, la Audiencia Provincial acaba de absolver al que fue durante su época como deportivista representante del jugador César Martín de los delitos de estafa o apropiación indebida por los que el futbolista lo sentó en el banquillo hace una semana. La querella tiene que ver con el impago al jugador de 252.000 euros, por los derechos de imagen obtenidos durante las temporadas 2004-2005 y siguiente.

Es la misma cantidad que el deportista le reclamó al club en 2007 tras concluir su contrato, y que la entidad deportiva abonó en forma de pagarés tras un acuerdo con el acusado. Algunos de ellos se pagaron, mientras que otros están reconocidos en el concurso de acreedores presentado por el Deportivo.

El agente, que ya no lo era cuando el jugador abandonó A Coruña en 2006, se enfrentaba a peticiones de condena de entre tres y cinco años de cárcel e indemnizaciones que la acusación particular elevaba hasta los 452.000 euros.

Frente a tales pretensiones, la sentencia descarta que su conducta en la gestión del contrato del jugador sea “típica” de los delitos de estafa o apropiación, al entender los magistrados que en las fechas en que se presentó la demanda laboral contra el club y del juicio “no existe vínculo contractual entre el inculpado y el querellante que produzca obligación de entrega o devolución de dinero o medios certáceos generados por el demandado RC Deportivo”.

 

no hay identidad

Los jueces consideran acreditado que cuando el agente negoció con el Deportivo el pago de la deuda de los derechos de imagen con pagarés lo hizo, no como representante del jugador (ya no lo era), sino en nombre del otro titular de los derechos reclamados, la inversora Belprix, a quien el futbolista había cedido esos derechos.

En contra de lo que denunciaban las acusaciones, que vinculaban de forma directa al acusado con alguna de las empresas que en aquellos años gestionaron los derechos de imagen del futbolista, la sentencia aprecia una “absoluta carencia probatoria” acerca de esa identidad personal entre el representante y alguna de las compañías inversoras, aun cuando “por su profesión –admite la resolución– contactaba o contrataba con ellas”.

Además, el dictamen de la Audiencia establece también que el acusado solo firmó con el futbolista “contratos de representación deportiva, y no los de imagen”, una negociación que según admitió en el juicio el jugador, “circulaba aparte”.

 

La Audiencia absuelve de un delito de estafa al agente del exdeportivista César Martín

Te puede interesar