9º-16º
miércoles | 24 abril | 2024
La alerta naranja anunciada ayer apenas se dejó sentir en la ciudad, pero la costa fue otra cuestión completamente distinta: las olas de más de cinco metros de alto obligaron no solo al cierre de los arenales del Orzán, sino también del Paseo Marítimo, en el tramo que discurre entre la Coraza y la explanada de las Esclavas, donde el agua batía con más fuerza y donde la altura de la calzada sobre el nivel del mar es mucho menor.
Fue cuando faltaban pocos minutos antes de la cinco de la tarde cuando las autoridades decidieron cortar los accesos a la playa. Las olas continuaron subiendo debido a la fuerza de la marejada y superaron las dunas protectoras que se forman cada año con excavadoras precisamente para estas contingencias. Ante la proximidad del oleaje, los servicios de emergencias decidieron cortar el paseo peatonal mientras continuara la pleamar, aunque los vehículos siguieron circulando.
toda la noche
Aún no eran las siete de la tarde cuando se reabrió el paso peatonal por el Paseo Marítimo pero, por motivos de seguridad, el Ayuntamiento decidió mantener cerrado el acceso a los arenales durante toda la noche.
En parte, la precaución se tomó porque era viernes, cuando hay más actividad en el Paseo Marítimo debido al ocio nocturno. Por eso el dispositivo habitual, formado por voluntarios de Protección Civil, Policía Local y Bomberos destacados en la Coraza, se mantuvo durante varias horas más.
La Dirección Xeral de Emerxencias e Interior había alertado del temporal costero. El hecho de que el viento soplara en dirección noroeste obligó a tomar precaución adiciones, puesto que por ese flanco, la bahía del Orzán no tiene protección frente a los elementos, de ahí el cierre del Paseo. n
