10º-19º
sábado | 20 abril | 2024
Cerca de 50 artistas coruñeses abrirán su corazón el sábado al ojo ajeno que es lo mismo que abrir la puerta de su estudio.
Aunque algunos cogerán de prestado el local de un pincel compañero, la tercera edición de Estudios Abiertos regresa para que los curiosos conozcan el hábitat natural de los que hacen arte con las manos ya sea pintura o escultura, y también los que salpican su impronta en distintas disciplinas.
El mapa de la ciudad se llena de cruces rojas, que serán paradas para el que quiera conocer el “cómo se hace” y, sobre todo, el dónde, en un recorrido que comenzará a las 12.00 horas y terminará con el día, sobre las 21.30 horas.
Para que no todo sea pintar y moldear, los creadores completarán su puesta en escena con propuestas diferentes que van desde talleres infantiles a monológos pasando por conciertos.
Recorrido
El búnker No Importa concentrará el lienzo de Óscar Cabana y las instantáneas de Pablo Mella y Roi Alonso. El toque lo pondrá Astrogirl a la guitarra en una jornada para dejar que la inspiración fluya. Cabana destaca la mano colaboradora del Ayuntamiento en el asunto. Desde María Pita se ocupan de la cartelería. Estrella Galicia y Bonilla ponen el avituallamiento.
El maratón de arte puede comenzar con Jano Muñoz y su hiperrealismo en Ángel Rebollo. Lo acompañarán Cuco y Mico Rabuñal. Muy cerca, Raúl Álvarez sumergirá al espectador y Erre pondrá stencil art en su estudio de Adelaida Muro. Olalla Franco le dará forma a la figura humana en la calle de Justicia y la pintura de Roge Fernández saldrá a respirar al mismo tiempo que la cerámica de Pablo Sainz.
Emile Gireau le dará vida a materiales usados en Mondoñedo con el pintor Gus Osuna y en la casa de Héctor Francesch habrá sitio para cinco más así que su acabado cómic bailará con Eme, Iria do Castelo, David Catá, Manuel Eirín y Analís.
Desde Capitán Juan Varela a Zalaeta, el croquis contiene hasta 50 puntos, individuales o compartidos, donde la mirada inquieta se colará a cotillear y hablar. Compartir y estar. Cabana explica que habrá 18 estudios más que el año pasado y que si de la primera entrega obtuvieron una respuesta muy positiva, en la segunda fue mejor aún porque “el público está muy contento y vienen con niños muchos y preguntan”.
Para que las familias pasen el rato entre paletas de colores, los protagonistas ofrecen obradoiros, algunos, y actuaciones. Se trata de hacer algo distinto y en eso, los que crean saben la receta. El objetivo no es otro que romper con la formalidad de las galerías y que la gente traspase el umbral.
