Un paseo por la figuración y la abstracción entre esculturas y cuadros de Márgara Hernández

Es más que probable que en algún momento de nuestra coruñesa vida hayamos estado delante de alguna escultura de Márgara Hernández, como la Sirena de la playa del Matadero, pero también es probable que no hayamos visto muchas obras pictóricas de la misma artista.

Pero hasta el 15 de octubre, en la sede de la Asociación de Artistas Plásticos Galegos (ARGA), podremos ver ambas facetas de Hernández, aunque las obras que proliferan son las pictóricas.

“Las esculturas las he hecho toda la vida y muestran un poco mi manera de ver la vida y demuestran también mi manera de ser”, comienza a explicar la artista. “Llevo muchos años haciendo eso, siendo escultora, por lo que quería cambiar un poco”, porque hasta ahora se centraba “en lo figurativo”. Y este cambio ha sido bastante notable, porque de la figuración ha pasado a la abstracción en sus pinturas.

Tal y como cuenta Hernández, nunca había hecho una exposición de pintura, pero, desde hace dos años comenzó “a pintar un poco más en serio, y vi que logré hacer algo más abstracto”, señala. Y este giro se puede observar en sus interpretaciones del viento, del aire o demás fuerzas de la naturaleza. Pero todo sin dejar de lado del todo la figuración, porque algunas de sus inspiraciones diarias, como los jarrones de flores, siguen presente en sus creaciones, todas técnicas mixtas, ya sea sobre lienzos o tablas.

Pintura “congénita”

Bromea Hernández al explicar que la presencia del dibujo y la pintura siempre han estado en su vida, ya que eran necesarias para elaborar sus creaciones de terracota, “se pude decir que la pintura y el dibujo son algo congénito conmigo”, dice entre risas.

“Con estas exposiciones hay que estar un poco pendiente de la gente”, explica la artista, que no descarta ponerse manos a la obra de nuevo en breves.