Feijóo carga contra Iglesias por insultar y contra Rivera, por su improvisación

El presidente de la Xunta y líder del PP gallego, Alberto Núñez Feijóo, cargó ayer contra los máximos dirigentes de las dos fuerzas emergentes en España, Albert Rivera (Ciudadanos) y Pablo Iglesias (Podemos).
Al primero de ellos le reprochó que se dedique a improvisar por hacer propuestas sobre la regeneración democrática y sobre quienes la deben hacer, los nacidos después de 1978, ya que “la madurez y la solidez política no la dan la edad de una persona”, dijo.
También censuró que esta formación que quiere tener presencia nacional quiera imponer primarias al resto de partidos porque, en su opinión, no parece normal que “un partido ponga las modas que le parezcan correctas y que el resto tenga que adaptarse y que digan: esto es moderno y es no lo es”.
“Supongo que estas propuestas viene de que es un partido improvisado desde el punto de vista nacional y también gallego y su improvisación es un indicador de que no es un partido de gobierno”, afirmó Núñez Feijóo.
“Y de momento nuestros amigos de Ciudadanos no lo tienen. Pero el tiempo dará y quitará razones”, concluyó.
Más duro se mostró con el líder de Podemos, que el martes participó en un mitin en A Coruña en un recinto en el que muchos ciudadanos se quedaron fuera sin poder escucharlo.
“Y así podríamos los gallegos escuchar con mucha más nitidez cómo vinieron a reñirnos, a insultarnos, a decir que somos un pueblo mediocre, no inteligente, que elige a corruptos, a narcotraficantes, que elige a lo peor del pueblo para que lo gobierne”, indicó Feijóo sobre las afirmaciones hechas por Iglesias en alusión al PP y a su propia persona.
Para Feijóo, la mayoría de los gallegos no piensa como él y no está de acuerdo en que este partido venga, con otra marca franquiciada en Galicia, las llamada Mareas, “para estar coaligados con partidos que no están en contra de las bombas, que están a favor de los referendums de independencia, y que prefieren, frente a la reflexión y moderación de los gallegos, el enfrentamiento y el radicalismo”.
“Los votantes moderados en Galicia ahora tienen más información”, dijo.