Algo más de siete kilómetros de asfalto conforman la II Legua Solidaria Hípica Malawi, una prueba atlética que combina forma física y solidaridad. El músculo lo pusieron ayer los más de 500 corredores que desde las once y media de la mañana gastaron zapatilla a lo largo del Paseo Marítimo en favor del Movimiento Nambuna Malawi, una organización sin ánimo de lucro que gestiona un programa social que se ocupa de los niños en situación más vulnerables de las calles de Lilongüe.
La Hípica organiza por segunda vez esta prueba deportiva, que tiene en el atleta coruñés Andrés Díaz a su director técnico y en la que colaboran el Apuntamiento, Gadis, Begano, Cabreiroá, Chamipochipnorte, y el restaurante La Huerta, además de los voluntarios del Club Atletismo Coruña Comarca, que ayudan de forma desinteresada.
Apenas 25 minutos después de la salida cruzaba la línea de meta, el corredor Diego Crespo, del Marineda Atlético, al que seguirían participantes de todas las edades en las distintas categorías.