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jueves | 25 abril | 2024
Dos mujeres murieron ayer en Ferrol a causa del coronavirus. Tenían 77 y 92 años y estaban ingresadas en el hospital Juan Cardona y en el Arquitecto Marcide, respectivamente. Son las primeras víctimas mortales de una enfermedad que continúa sumando positivos e ingresos. Ayer se contaban en el área tres confirmaciones más, llegando hasta 27, con 16 personas pasando la enfermedad en el domicilio y el resto, once, ingresadas. Son datos estadísticos correspondientes al cierre del sábado, ya descontados los fallecidos, y que se facilitan durante la mañana del día siguiente (domingo, en este caso). Hoy se prevé un aumento considerable tanto de positivos como de ingresos en planta y en UCI. Con el incremento del número de test que se realizan (empieza el punto fijo en el Novoa para hacerlos sin que el paciente se baje del coche), serán también mayores las cifras de afectados.
La máxima preocupación en la actualidad son las personas de más de 60 años, que en este momento suponen el 95% de los fallecimientos en toda España, según los datos desagregados por edades que ayer daba a conocer el Ministerio de Salud. Solo en el término municipal de Ferrol, el 27,77% de la población tiene más de 65, indican las cifras más recientes del Instituto Galego de Estatística. Se insiste en proteger a este sector, en que se aíslen y tomen todas las medidas a su alcance para evitar contagios. Si el confinamiento es importante en todas las edades, todavía más en los mayores.
Más allá de las cifras, los fallecimientos tienen detrás historias vitales y familiares que se truncan a causa de esta pandemia. En esto insistían ayer en redes sociales las personas allegadas a la paciente de 77 años, Marta Soto Novás, que recordaban su vitalidad, su gusto por viajar –recientemente estuvo con el Imserso en Lloret de Mar y la sospecha familiar es que ahí pudo haberse contagiado– y su amor y cuidados hacia hijos y nietos. Hacían así presente su pérdida en medio de la frialdad de los números. En un momento en el que está restringido al máximo el acompañamiento en el duelo, los homenajes y los mensajes de afecto se canalizan también a través de las redes. Tras cada cifra hay una persona.
Las dos fallecidas tienen informes médicos en los que se recogen patologías previas. Este término, explican desde el Sergas, puede incluir tanto afecciones ya existentes, que aunque permitan una vida normal se convierten en complicaciones graves si se les suma el coronavirus, como problemas que se presentan en el momento del ingreso.
Cuarentenas sanitarias
Otro de los colectivos que más preocupa por su exposición y por el número de contagios que registran es el sanitario. Desde el Ministerio se han establecido protocolos de actuación en los centros ante casos posibles de coronavirus, por presentar sintomatología respiratoria, pero aun así pueden existir exposiciones de riesgo, sin equipos de protección, para las que está indicado retiro domiciliario durante 14 días. Esto puede pasar con más frecuencia si no hay una sospecha previa debido a la falta de síntomas indicativos. La consecuencia, además del riesgo personal y de extender la infección, es la merma del personal disponible en el momento de mayor demanda.
Desde al área se da por hecho que esto que ha sucedido ya en otros territorios también va a pasar aquí. Y, en este sentido, hay personal del Juan Cardona en retiro domiciliario, junto con sus familias, por este motivo.
