11º-16º
miércoles | 17 abril | 2024
El consejero Miguel Otero dinamitó ayer la paz de la directiva blanquiazul al emitir un comunicado en el que expresa su nerviosismo por la ampliación de capital que supondrá el alivio económico de la deuda del Deportivo, haciéndose máximo accionista del club Abanca.
Tanto el presidente, Fernando Vidal, como el resto de consejeros de la entidad, se enteraron de los términos del mismo por los medios de comunicación. De hecho, a algunos miembros del consejo les sorprendió que ante el claro distanciamiento con los compañeros, no hubiese dimitido antes, en lugar de prender el fuego ‘desde dentro’.
Sus dudas
Miguel Otero que ha tenido relación con todas las directivas que han pasado por el club últimamente, se plantea una serie de preguntas. “¿Qué resuelve la capitalización o venta del Deportivo a diez años vista, ¿A la vista de las cuentas, no será mejor vender otro activo del club en lugar del propio club?, ¿No estaremos mal vendiendo la vaca para mañana tener que comprar la leche?”.
“Desde el Consejo de Administración debemos facilitar a los accionistas toda la información de la que disponemos, para que la conozcan y decidan. Esa es la obligación a la que nos debemos los administradores; y los accionistas, decidir, pero con los datos reales del club en la mano. Luz y taquígrafos”.
“A ver si va a resultar que el Deportivo no está tan ‘escarallado’”, parafraseó al presidente de Abanca, Juan Carlos Escotet, para referirse a la situación del club.
En un escueto comunicado de un folio, el consejero ha hecho que Fernando Vidal tenga que lidiar con su primera crisis, y no solo eso. Cuando el presidente dio a conocer su consejo, la sorpresa era la presencia de Miguel Otero. Al mandatario blanquiazul le recomendaron incluso prescindir de él, pero se negó, avalando su presencia, apostando decidamente por él, en una candidatura de consenso donde todo el deportivismo estuviese representado. En las últimas horas Vidal no dejaba de salir de su asombro, ya que su proyecto, presentado a los socios hace meses, con un préstamo de cinco millones que fue básico para que el Depor ‘respirase’ desde diciembre, no dejaba de ser también el proyecto de Otero.
De hecho, fue clave con el resto de consejeros para conseguir más del 25% de las acciones de cara a la aprobación de la ampliación de capital que no se pudo celebrar en marzo por el Estado de Alarma.
El directivo, que ha mantenido disputas con Juan Carlos Rodríguez Cebrián, asesor del presidente, desde que el nuevo consejo se hizo cargo del club, expone que “hay nerviosismo, el pasado 24 de marzo se crea una comisión económica para, un mes después, disolverla tras haber profundizado en las cuentas del club”. Se entiende que en esta comisión estaba Otero y que se cerraba precisamente tras el relevo en la dirección financiera de la entidad.
No se explica en el comunicado este extremo, como tampoco las alternativas al proyecto de la mano de Abanca.
El consejo se reunió ayer sin la presencia de Otero, quien no expresa voluntad de dimitir en el artículo enviado a la prensa. Es posible que en las próximas horas responda con un comunicado o incluso con una rueda de prensa del presidente Fernando Vidal.
