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viernes | 19 abril | 2024
Con el objetivo de desbloquear la situación en la que se encuentra la depuradora de Barrañán, el alcalde de Arteixo, Carlos Calvelo, ha solicitado una reunión con el conselleiro de Medio Ambiente, Agustín Hernández. Esta planta fue construida por la Xunta y lleva tres años paralizada.
Como explica el concejal de Obras, José Amado, su intención es llegar a un entendimiento con Augas de Galicia. En este sentido añade que la EDAR debería estar recepcionada ya que un ingeniero de Augas de Galicia ratifica en un informe que la planta está bien.
Bajo estas premisas, Amado señala que a partir de la reunión que mantengan con Hernández, comenzarán a tomar decisiones siempre con la meta de poner a funcionar la depuradora.
En este sentido, cabe recordar que la Consellería de Medio Ambiente inició un expediente sancionador contra la administración local por negarse a recepcionar la infraestructura. A su vez, el anterior responsable de Obras, José Márquez, señalaba que el Ayuntamiento no asumía la planta porque presentaba numerosas deficiencias, que provocaban que vertiese al río.
Un término que también denunció Adega en febrero de este año. La entidad ecologista aseguraba que la depuradora tenía su punto de vertido en una zona de escaso caudal en el río Sisalde, un problema que se agrava en verano y que provocan un forte olor e deixa todo de cor negra.
Meses antes, el Seprona también confirmaba que la estación vertía aguas fecales a un regato, después de que los nacionalistas denunciasen el estado de la planta de Barrañán.
Antes de todo eso, el anterior bipartito recriminaba en 2010 a la Consellería de Medio Ambiente los modos en los que habría dado por recepcionada la planta. Como señalaban desde la administración arteixana, la empresa encargada de su construcción dejó las llaves en el registro, antes de que se firmase un acta de recepción que continúa sin estar rubricada.
Gasto > Una vez que la estación depuradora de Barrañán entre en funcionamiento, el Ayuntamiento o la Xunta tendrá que realizar una inversión de medio millón de euros anuales en concepto de mantenimiento.
De momento, la planta solo ha funcionado a medias y para efectuar pruebas de funcionamiento. Fue a raíz de estas actuaciones cuando los técnicos municipales elaboraron un informe en el que recogían que las obras presentaban deficiencias.
Pero esta planta comenzó con problemas desde sus orígenes. Antes incluso de que empezase a ser una realidad, las dificultades empezaron con la obtención de los terrenos. A continuación, el acondicionamiento del terreno resultó ser más complejo de lo previsto lo que hizo que las primeras actuaciones ya sufriesen un retraso.
Cuando la EDAR ya era una realidad, fue necesario que Augas de Galicia y la Consellería de Industria diesen su visto bueno para que empezase a ser operativa. El siguiente escollo llegó con Fenosa, ya que la planta necesitaba electricidad y este trámite no se cumplió hasta el año pasado ya que la empresa entendía que no podía dar de alta la energía hasta que el Ayuntamiento recepcionase la obra.
Después de tres años de idas y venidas con la estación depuradora, el equipo de gobierno recién llegado espera poder alcanzar una solución que permita eliminar los vertidos de la ría de Barrañán.
