Urbanismo cederá un solar aún por ubicar a Sor Eusebia para el proyecto “Mi casita”

El presidente del Hogar Sor Eusebia, José Vicente Martínez, y el director de la Escuela Técnica Superior de Arquitectura, Fernando Agrasar, se reunieron ayer para darle forma al proyecto “Mi casita”, que la institución benéfica espera poner en marcha en el último trimestre de 2016 si las instituciones responden a buen ritmo, tal y como afirma su director Diego Utrera. Y es que pese a que Sor Eusebia disponía de un terreno en Bens para sacar de la calle, en un primer término, a 20 personas sin recursos, su condición de suelo rústico supondría salvar una serie de barreras burocráticas que atrasarían su puesta en escena. Es por eso que el Ayuntamiento les ofreció el mes pasado un solar alternativo todavía por ubicar en el mapa de la ciudad. Utrera señala que la cesión de la finca se acordó en la última reunión mantenida con el concejal de Regeneración Urbana, Xiao Varela, en diciembre y que lo siguiente fue concretar esta cuestión en enero en una visita a la que también acudirá la edil Silvia Cameán. 
Mientras, la colaboración con Arquitectura pasa por convocar un concurso de ideas para escoger la estructura de vivienda que mejor se adapte a las necesidades de los ocupantes, que dispondrán de las llaves para entrar y salir cuando quieran y los servicios habitacionales básicos para que puedan hacer vida en siete metros cuadrados. 
Según Utrera, Agrasar estableció ayer las líneas de actuación que agruparán a los estudiantes en equipos. Tutelados por un profesor, los aprendices de arquitectos desarrollarán la idea que les parezca más interesante cumpliendo con las condiciones de un pliego, que también esperan cerrar en cuanto sepan dónde estará localizada la parcela. En caso de que el compromiso municipal caiga en saco roto, Utrera asegura que volverán a retomar la idea de levantar las casetas en el terreno anexo. 
En cuanto a la negativa de los vecinos a localizarlos en Bens, el director muestra la intención de dialogar con ellos y buscar una solución porque “para oponerse a algo, hay que conocerlo”. Añade el responsable que el proyecto supondrá un tipo de prestación totalmente diferente a la que ofrecen en el hogar: “Esas personas rechazan otra clase de recursos. Tienen una problemática de tipo psiquiátrica importante ya que la soledad les impide integrarse en una estructura definida”. Con la propuesta tratarán de llegar a ellos: “Según los datos, 90 viven en cajeros y quicios de los portales”. 
En la sociedad actual, “no podemos tolerar que esta gente viva en la calle” y de los primeros 20 inquilinos, Utrera confía en que se sumen otros más, una vez que comprueben que funciona el experimento: “En su tipo de vida nadie se va a meter”. Con el solar y la correspondiente licencia de obra, “Mi casita” necesitaría también de una autorización administrativa por parte de la Xunta. El lunes se reunirán con el vicesecretario de Política Social, Camilo Ríos, para solicitarla.