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viernes | 19 abril | 2024
La cadena Gadisa inauguró ayer un nuevo supermercado en O Castrillón que supone llegar a los 35 establecimientos en la ciudad de A Coruña. La tienda responde a las demandas del barrio, que no contaba con una zona para compras tan amplia, y eso quedó demostrado con la respuesta de los consumidores al llenar la superficie comercial desde su apertura a las 09.00 horas. El estreno ha permitido ampliar en 23 personas la plantilla de Gadis.
El supermercado, ubicado en la parte inferior del polideportivo de O Castrillón –en la avenida de Casanova de Eirís–, es “de los más grandes de la ciudad”, pues cuenta con un espacio algo superior a los 1.600 metros cuadrados dedicados a estanterías y lineales. Así lo explicaron ayer el director de comunicación de Gadisa, José Luis Astray, y el delegado de área, Baltasar López.
“Es un establecimiento muy cómodo que permite hacer la compra de forma rápida”, incidió Astray, que aclaró que los consumidores podrán dejar los coches en un aparcamiento con acceso directo al local. Este abrirá de 09.00 a 21.45 horas y allí encontrarán “más de 10.000 artículos diferentes”, entre los que ayer se colaron los tres jamones que se iban a sortear entre los clientes para celebrar la apertura.
Esta supone que la compañía cuente ya con 35 superficies de venta en A Coruña, de las cuáles dos se ubican en el barrio. A nivel general, desde Gadisa aclararon que en la actualidad están trabajando “para estar más cerca de nuestros clientes y tener una mejor propuesta para su compra”.
Mejoras para la movilidad
“Hay que adaptar la oferta a las necesidades”, puntualizaron, algo que parece haberse cumplido con creces a tenor de las primeras declaraciones de los usuarios. El área estuvo llena durante toda la jornada y los primeros vecinos que acudieron allí dijeron estar “contentos” por el cambio cualitativo.
Para la apertura de la macrotienda se cerró en Antonio Noche hace unos días. La plantilla se trasladó y a esta se le sumaron 23 empleados nuevos, conformando un equipo de 46 personas.
En general, los residentes en el entorno se felicitaron por poder evitar la cuesta que antes tenían que subir y bajar. “Es una maravilla porque está más cerca y estamos muy emocionadas de estar aquí”, revelaba una niña, robándole la palabra a su madre.
