m. rodríguez > arteixo
La Concejalía de Servicios Sociales, que dirige la socialista Lourdes Loureiro, se ha convertido en un pilar fundamental para un buen número de familias del municipio ante la actual situación económica. Así, solo en el primer trimestre, el departamento ha tenido que destinar unos 17.000 euros para hacer frente a ayudas de emergencia social.
Con este tipo de partidas, la concejalía pretenden dar un empuje a los que peor lo están pasando, y permitirles así costearse su alimentación, medicamentos e incluso alquileres o las facturas propias del hogar como la luz.
En este sentido, una buena parte de estos 17.000 euros se la llevan arrendamientos y facturas, en concreto, un 34%. Un porcentaje que se traduce en unos 6.000 euros. Como explican, no se trata de una ayuda continuada, si no que son una subvención puntual para que una familia no se vea durmiendo en la calle.
La mayoría de las partidas están relacionadas con la alimentación y suponen un coste para el departamento una partida similar a los alquileres, unos 5.000 euros.
Servicios Sociales también ayuda a los residentes en el municipio a hacer frente a gastos que tienen que ver con los medicamentos o sociosanitarios.
De este modo, en el primer trimestre de este año, la concejalía destinó 800 euros a estas situaciones. Un gasto que recoge partidas que van desde los 12 euros hasta los 300.
El resto de este dinero, que semana a semana se aprueban en junta de gobierno tienen que ver con asuntos varios como por ejemplo material escolar, transporte o suministros para las familias del municipio.
Este tipo de ayudas suponen una importante partida del departamento. De hecho, a lo largo del año pasado, Servicios Sociales invirtió más de 100.000 euros para paliar los 300 casos de emergencias sociales que tuvieron.
Otro tipo de ayudas > A mayores de las emergencias sociales, las ayudas de este departamento van más allá y recogen aspectos como la comida a domicilio (que se financia íntegramente con dinero municipal desde el año pasado), el servicio de transporte adaptado o, incluso, la reserva de plazas en la guardería municipal para casos urgentes.
La Xunta financió hasta 2010 el servicio de comida a domicilio con 38.000 euros. El año pasado, Benestar decidió cambiar el método y repartir las bandejas de comida para los siete días de la semana en un solo viaje. Un mecanismo que el Ayuntamiento consideró intolerable, por lo que decidió hacer frente a este coste.
Como explicaba Loureiro, el programa Xantar sobre rodas tiene dos objetivos fundamentales, garantizar una dieta adecuada a las personas dependientes, y, por otro lado, mantener el contacto con los usuarios.
Además, Servicios Sociales también se encarga del servicio de transporte adaptado, que cuenta con 300 usuarios y un precio de 71.000 euros anuales.