Reportaje | Pequeños y grandes paisajes en los que a Diana Aitchison le gustaría estar

Reportaje | Pequeños y grandes paisajes en los que a Diana Aitchison le gustaría estar
La exposición se puede visitar hasta el 8 de diciembre | quintana

Diana Aitchison muestra varios países hechos grabado, de bocetos y acuarelas que materializó a pie, mientras caminaba y terminó en su taller betanceiro pasándolos a esta otra técnica. Así en Bomoble, aparecen Canadá e Italia en gran formato, junto a Gales y Galicia, esta última representada por Oleiros, por la playa de Bastiagueiro y Santa Cruz. Todos son parajes donde le gustaría estar. Entran por el ojo que se recrea en matices y se ventila con la brisa del mar. 
Ella va escupiendo lo que almacena en su cabeza que funciona como un disco duro. El local de Nuestra Señora de Rosario, 11, pone a desfilar también los bocetos, que son el origen de lo que viene después. Cuenta la creadora que según cómo es la imagen que baila en su mente se sirve de un tamaño o de otro “a veces es pequeñito porque grande no es lo mismo”. Solo le da más dimensiones si tiene bastante fuerza. 
La muestra enseña el proceso, de cuando pasea por la playa y se detiene, pinta, se va y vuelve a ella desde la distancia. De Betanzos, retrata O Pedrido y el conjunto respira de lo que Diana lleva absorbiendo toda la vida, de los franceses impresionistas con los que creció y los ingleses acuarelistas de los que cogió recortes para hacer suyo un estilo que hoy pasea por la ciudad. 
Entre tanto, Aitchison se acuerda de Paul Nash, que retrató con el pincel la Primera Guerra Mundial, de Fragonard, “de un estilo muy del siglo XVI” y de Watteau, un abanico de nombres de los que se fue alimentado. Diana sigue pintando todos los días, ahora está con una estampa. Sobrina del conocido pintor escocés Craigie Aitchison (1926-2009), nació en en su casa familiar de Edimburgo. 
El destino quiso que su tío Craigie coincidiera en la Slade School of Art de Londres con Tim Behrens,  con el que contraería matrimonio y que falleció el año pasado. La pareja amante de los viajes, recaló a finales de los 80 en Galicia, donde instalaron su hogar. Actualmente, Diana vive y trabaja en A Coruña. “Grabados y acuarelas” es una oportunidad para conocerla. Hasta el 8 de diciembre, se pueden ver sus pequeñas realidades, con formas que la mirada completa. l

Reportaje | Pequeños y grandes paisajes en los que a Diana Aitchison le gustaría estar

Te puede interesar