10º-19º
viernes | 19 abril | 2024
Una “abertura en la tierra, y más comúnmente en una montaña, por donde salen de tiempo en tiempo humo, llamas y materias encendidas o derretidas”, recoge el diccionario de la RAE. Una definición que puede resultar demasiado amplia para un niño de seis años, los que tienen los 22 alumnos de 1º de Primaria del CEIP de Oza dos Ríos (Oza-Cesuras), y que está iniciando sus conocimientos de Geografía. La mayoría nunca ha visto un volcán, salvo aquel que hizo una excursión fuera de Galicia.
Así, con la intención de despertar el interés de los menores por este campo del conocimiento, la tutora del curso decidió desarrollar un proyecto educativo basado en los volcanes que, de alguna manera, “abrió” un enorme cráter, con su humo y su lava, en plena aula, en las instalaciones del número 35 de Lois.
“Medio Metro”
La iniciativa trata de explotar la gran atracción que generan los volcanes y erupciones y los fenómenos asociados al vulcanismo en escolares de la misma edad que los de Oza.
Los pequeños se encargaron de la construcción de la maqueta de un volcán, que además de mostrar sus aspectos físicos, reproduce también la actividad eruptiva, señalan fuentes próximas al CEIP de Oza dos Ríos.
El volcán, de casi medio metro de altura sobre el nivel de la mesa y que ocupa un lugar destacado en el aula de 1º de Primaria, entró en actividad arrojando gran cantidad de lava –igual de roja que la de verdad, pero escolar – a través de su cráter, descubriendo a los veintidós niños algunos de los secretos mejor guardados de la Tierra.
Experiencia
Unas erupciones de una violencia inofensiva formadas por la reacción desencadenada por la mezcla de bicarbonato de sodio y vinagre, con un añadido de tinte para un aspecto lo más real posible a esta estructura geológica de laboratorio, explicaron desde Oza-Cesuras.
La experiencia a juicio de la profesora, tuvo los efectos deseados sobre la curiosidad de los pequeños, que ya están ampliando sus conocimientos sobre la geografía y, en consecuencia, acercándose con el mismo interés a las montañas, las cordilleras, océanos y continentes, desde Europa hasta Australia, pasando por América, África y Asia. Incluso la Antártida.
