La capital libia, Trípoli, vivió ayer una jornada de huelga general, que debe extenderse hasta mañana, en señal de duelo por las 43 personas muertas en la sangrienta manifestación del pasado viernes. El consejo local de Trípoli lanzó el sábado el llamamiento a una huelga general de tres días, durante los cuales se volverá a exigir la marcha de las milicias armadas establecidas en la capital.