El calor y el viento marcan el inicio de la temporada de playa

El inicio de la temporada de playa quedó marcado este año por la mezcla de altas temperaturas y fuerte viento, que se dejó notar durante todo el día de ayer y que obligó a los socorristas a extremar la vigilancia en lo que  normalmente es una jornada de toma de contacto.
Los incidentes más relevantes fueron los de dos bañistas que tuvieron que ser trasladados al Complejo Hospitalario Universitario, debido a golpes de calor que sufrieron cuando el sol se encontraba en su cénit. El primer caso, que afectó a una mujer de avanzada edad, tuvo lugar a la una de la tarde en la playa de San Amaro. A esa hora la temperatura rondaba los 25 grados a la sombra, y afectó a la mujer, que perdió el conocimiento y tuvo que ser asistida por los socorristas.
Ya al filo de las cinco de la tarde tuvo lugar el siguiente incidente, que protagonizó un joven de 26 años que se encontraba en el arenal del Orzán. Según las informan fuentes municipales, se estaba dirigiendo a las duchas (presumiblemente para refrescarse) cuando se desmayó, vencido por el calor. Como en el anterior caso, siguiendo los protocolos que rigen cuando se sufre una pérdida de conocimiento, fue trasladado por la ambulancia que se encuentra destacada en la playa al centro hospitalario, para ser sometido a un chequeo.

bomberos en oza
Un factor que pudo agravar el efecto del calor fue el viento, puesto que los bañista buscaban los lugares más resguardados, donde la temperatura era más elevada. En cambio, en la playa de Oza, el viento, que llegó a alcanzar los 44 kilómetros por hora, provocó la rotura de una rama a las dos de la tarde.
Fue necesario que los bomberos acudieran para retirar la rama colgante ante la amenaza que ofrecía. Por el contrario, el mar no generó ningún incidente que lamentar a pesar de que el viento, que soplaba hacia tierra, levantó algo de oleaje. n