Paderne-El municipio concluye su tradicional feria con un gran éxito de público

  Paderne cerró ayer su tradicional feria con un balance muy positivo y un gran éxito de público. A lo largo de dos jornadas, el municipio ofreció a los visitantes muestras de ganadería, flor, alimentación, huerta, maquinaria, de su riqueza forestal, el comercio local y la artesanía.
Un espacio que sirve de punto de encuentro para profesionales y comerciantes de la comarca de As Mariñas, así como un magnífico expositor de la riqueza que ofrece el municipio, un “paraíso entre ríos no que estamos todos a traballar”, como lo define su alcalde César Longo que destaca de las actividades que se organizan las pruebas caninas y de hípica que se han convertido en todo un clásico del recinto ferial.
La jornada de ayer comenzó por todo lo alto con el octavo encuentro motero. Sobre dos ruedas los visitantes tuvieron la oportunidad de dar una “Volta a Terra das Mariñas”.
Mientras que los moteros recorrían los lugares con más encanto de las inmediaciones del municipio, en el recinto ferial comenzaba un taller de marroquinería en el puesto de Elena Ferro, que mostró –y enseñó– a los visitantes el arte de confeccionar utensilios con piel.
Sin salir de los talleres, el stand de Souto se encargó de ofrecer las claves de la cestería bajo la batuta de Isabel Orgeira, lo que dio paso al trasquilado de ovejas en la carpa de gando.
La talla de esculturas en madera con motosierra con Francisco Escudero, y los talleres para niños fueron otras de las demostraciones y actividades que los visitantes pudieron disfrutar.
En el apartado más deportivo, la última jornada se reservó para una exhibición ecuestre a cargo de la Finca Regueiral, así como para otra muestra de la buena puntería de Isabel María Cerviño con tiro con arco.
La gastronomía también tuvo su importancia con la cata de vinos de Betanzos y la degustación de ternera de Paderne que puso punto y final a la feria.