r.l. > A CORUÑA
El delegado del Gobierno en Galicia, Miguel Cortizo, realizó ayer un balance sobre la reunión mantenida el miércoles con el alcalde de A Coruña, Carlos Negreira. Cortizo no dudó en destacar y elogiar la buena disposición del nuevo regidor de la ciudad para trabajar conjuntamente con la Delegación del Gobierno.
Solo puedo decir que la reunión ha sido muy positiva y que ha sido la primera de una serie de reuniones que vendrán en el futuro, apuntó el delegado.
Cortizo se mostró abierto a todas las sugerencias del Ayuntamiento y recalcó que el hecho de pertenecer a formaciones distintas no debería enturbiar las relaciones que se establezcan con el gobierno municipal coruñés. Yo no tengo la necesidad de hacer oposición al Ayuntamiento y ellos tampoco tienen por qué hacérsela del Gobierno, matizó Cortizo.
Unas palabras significativas, dado que la colaboración entre el delegado del Gobierno y el ex alcalde, Javier Losada, no había estado exenta de tiranteces, pese a pertenecer al mismo partido.
Cortizo también pidió a la Xunta que siguiese el ejemplo de Negreira y su equipo de gobierno a la hora de establecer contactos con la Delegación.
Por el momento, el único punto en el que discrepan Delegación del Gobierno y el Ayuntamiento es en su actuación con respecto a los indignados que siguen en el Obelisco. Mientras Negreira pedía que los acampados desalojasen la zona, Cortizo afirmaba que de momento no se hará nada porque no hay perturbación del orden público.