Reportaje | El mítico Batallón Literario que luchó contra los franceses no fue el único

Reportaje | El mítico Batallón Literario que luchó contra los franceses no fue el único
Placa conmemorativa del Batallón Literario de 1808.en la plaza compostelana de A Quintana

La mayoría cree que el Batallón Literario Compostelano nace como consecuencia de la Guerra de la Independencia, al calor del alzamiento en Galicia al igual que aconteció en el resto de España contra la ocupación francesa por las huestes de Napoleón, alcanzando un elevado grado de popularidad entre la población, pero no es así.
El primer Batallón se organiza en 1662 de la mano de Pedro Carrillo y Acuña, arzobispo de Santiago, quien ejerce de capitán general del Reino de Galicia de 1661-1663. Se destina para la defensa de Monterrei, aunque es despachado para Tui.
La formación no llegaría a entrar en combate, toda vez que el ataque lusitano a Monterrei formaba parte de una distracción militar para mantener ocupadas a las fuerzas gallegas y alejarlas de este modo del verdadero teatro de operaciones, que se traslada al río Miño.
Por este motivo, el conde de San Juan y gobernador de Tras-os-Montes marcha sobre las fuerzas del capitán general Pedro Carrillo. El primer objetivo de los portugueses que cruzan dicho río aguas abajo de Tui es la fortaleza de Goián, la cual es una de las que guardan la desembocadura de aquel caudaloso río.

Los portugueses portan una eficaz artillería que logran la rendición de dicha fortaleza. De inmediato, acuden las tropas del capitán general, pero los portugueses que se hallan bien fortificados rechazan aquel virulento ataque.
Dos años más tarde se moviliza en Santiago un segundo Batallón Literario con el mismo fin. Bajo las órdenes de Iñigo Melchor Fernández de Velasco, duque de Frías y Condestable de Castilla, a fin de contener el avance de las fuerzas portuguesas en suelo de Galicia, entre Goián y A Guarda.
Tuvo el Batallón Literario una destacada actuación desde su llegada al frente de Goián en 1665. Valiéndose los portugueses, en 1666, de ambas cabezas de puente saquean los pueblos del Valle del Rosal y las aldeas de Gondomar, siendo contenidos por las tropas del Condestable. Mientras que en la frontera de Ourense con Tras-os-Montes, los portugueses del conde San Juan, saquean el pueblo de A Mezquita. Se trataba de los últimos combates que se libraban con Portugal en la frontera de Galicia. Durante la Guerra de Secesión española de 1714, tiene lugar el nacimiento del tercer batallón.

Reunión
La creación del cuarto Batallón Literario surge con motivo del alzamiento contra la ocupación francesa y se forma cuando la Junta del Reino de los delegados de las siete provincias gallega de Santiago, Coruña, Betanzos, Lugo, Mondoñedo, Ourense y Tui, se reúnen en la ciudad de la Coruña el 30 de mayo de 1808, para otorgar el servicio de Millones.
Al día siguiente los delegados que tenía el claustro de la Junta de Defensa de Compostela, Vicente Neira, Pedro Piñeiro, Antonio Álvarez, Francisco Cabrera, Juan Lareo y Mariano Espiñeiro, eligen como coronel del Batallón Literario a Ignacio Armada y Mondragón, marqués de Santa Cruz de Rivadulla.
A esta Junta se unen los obispos de Ourense y Tui, a la vez que son enviadas embajadas a Inglaterra en solicitud de todo tipo de ayuda económica y material, quedando el Ejército de Galicia al mando del general Joaquín Blake, en cuya fuerza formará parte el Batallón Literario de los estudiantes de la Universidad de Compostela en 1808.
Este batallón, queda al mando del marqués de Santa Cruz de Rivadulla y con José Dionisio Valladares, como el abanderado de la unidad, su lema quedó definido en “Palladis Regio Pro Libertate Regia”. Todos sus integrantes tenían la graduación de cadetes divididos en seis compañías de 168 miembros cada una con sus respectivos jefes y oficiales.
El 11 de julio de 1808 se celebra la jura de bandera, cuya enseña es bendecida por el propio arzobispo de Santiago, Murquiz.
Esta fuerza de la milicia universitaria junto con el ejército regular interviene en diversas acciones de combate desarrolladas en Lugo y Ponte-Sampaio, así como en otras que se celebraron fuera de Galicia como Alba de Tormes y Tamames. En el muro del convento de Sampaio de Antealtares, el cual da a la plaza compostelana de A Quintana, es el lugar elegido para que los estudiantes presten su juramento de fidelidad a la causa, una placa perpetúa aquel recuerdo.
Por última vez en 1846, se organiza el quinto y último Batallón Literario, en esta ocasión para secundar el alzamiento de Galicia contra el Gobierno de Narváez.

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