El Consorcio descubre que vecinos de Arteixo y Sada no pagan por la basura

El Consorcio das Mariñas ha descubierto que vecinos de los ayuntamientos de Arteixo y Sada no se habían dado de alta en el servicio de recogida de basura, por lo que tampoco abonaban las tasas establecidas, a pesar de beneficiarse del mismo.
Fuentes de la entidad supramunicipal indican que a lo largo de estos días se ha remitido a estos vecinos la reclamación de los pagos de hasta cuatro anualidades, después de que en una supervisión del padrón se detectase que no estaban dados de alta en el servicio.
El Consorcio hizo públicas las reclamaciones después de que ayer el Ayuntamiento de Arteixo solicitase, ante la gerencia de la entidad, información relativa a estas deudas que se remontan a las últimas cuatro anualidades.
El Gobierno local arteixán, que preside Carlos Calvelo, indicó que recibió en los últimos días múltiples quejas de vecinos a los que se les reclamaba que abonasen los recibos adeudados.
El Ejecutivo local quiere saber si la inspección afecta únicamente a los residentes en Arteixo o si también hay otros municipios afectados por la medida; si las cantidades reclamadas están asentadas en la contabilidad del Consorcio; cuando se adoptó la decisión de iniciar dicho proceso de regularización, y cual es la cantidad económica que estima la entidad que se puede recaudar con la medida.
El Consorcio mantuvo ayer una reunión con responsables de la empresa adjudicataria del servicio de recogida de sólidos urbanos, después de que así lo decidiesen con anterioridad los alcaldes de los nueve municipios que conforman la entidad.
Los responsables locales, a excepción de Ramón García Vázquez, por Betanzos, y José Luis Fernández Mouriño, por Carral, que no pudieron acudir al encuentro, plantearon a la concesionaria una rebaja en los costes del servicio.
Según fuentes del Consorcio, la empresa se comprometió a estudiar si existen posibilidades para reducir el precio y a presentarlas al ente supramunicipal.

polémica
Cabe recordar que el precio del servicio de recogida de basura ha abierto una brecha entre los miembros de una entidad que desde su fundación en el año 2000 se ha caracterizado por la unanimidad a la hora de adoptar decisiones, independientemente del color político de los distintos municipios.
La polémica se suscitó cuando el Gobierno local de Arteixo planteó la posibilidad de municipalizar el servicio de recogida de basuras, como ya había hecho anteriormente con el del suministro de agua, ya que consideraba que le saldría más barato.
Este planteamiento supuso poner en solfa el principio sobre el que se fundó, en su momento, la entidad supramunicipal. Y es que el Consorcio se constituyó a través de fondos europeos a los que solo se podían conseguir si existía un quorum mínimo de participantes en la iniciativa.
La posibilidad de que uno de los ayuntamientos fundadores del ente pueda abandonarlo podría significar incluso su final.