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viernes | 19 abril | 2024
Dos meses después de su puesta en marcha, la campaña de incentivos al consumo sigue creciendo y ya son 22.905 las personas que se han descargado los bonos de descuento del Plan de Reactivación Económica y Social de A Coruña, según los datos facilitados por el Gobierno local.
Los negocios adscritos pueden facturar un total de 3.000 euros por cada establecimiento excepto en el caso del sector cultural, en el que la cantidad asciende a 5.000 euros. Actualmente, doce comercios de la ciudad ya llegaron a la cantidad máxima disponible y son más de 700 los que están adheridos a esta iniciativa.
“El Ayuntamiento está cerca de la gente; pusimos en marcha esta iniciativa pionera para incentivar la actividad económica en el pequeño comercio, la hostelería y el sector cultural por la que cada ciudadano recibe 105 euros para gastar en esos sectores”, afirmó la alcaldesa Inés Rey hace unos días. Cada vecino de la ciudad puede utilizar hasta tres bonos en el sector comercial, hostelero y cultural, suponiendo, por ejemplo, diez euros de rebaja en compras de treinta euros o más en el comercio; cinco en consumiciones de hostelería por un valor de veinte euros o más de un 40% de descuento en adquisiciones culturales de más de diez euros.
Alargar el plazo
Dado el éxito de la campaña hasta el día de hoy, la Federación Unión Comercial Coruñesa (FUCC) solicitará la próxima semana en una reunión con representantes del Gobierno local la ampliación del presupuesto disponible en cada establecimiento, tal y como adelanta su presidente, José Luis Boado. Además, desde la federación insistirán de nuevo en la necesidad de alargar esta campaña hasta finales de diciembre “para favorecer las ventas de Navidad”. El balance, sin embargo, es positivo por parte de los comerciantes, y es que destacan que “se trata de una iniciativa nueva y muy interesante, aunque necesita mejoras en el futuro”.
El Plan de Reactivación Económica y Social de A Coruña está dotado con 13,2 millones de euros y se aprobó por unanimidad el 1 de junio. Para Boado, pese a ser una idea “innovadora”, supone una limitación para los comercios de proximidad de la ciudad, ya que “muchos no están actualizados en las redes sociales ni en las tecnologías”, algo que también comentarán en la reunión de la próxima semana.
