La Guardia Civil busca a un vecino de Betanzos que desapareció el domingo

La Guardia Civil, la Policía Local y Protección Civil de Betanzos buscan a Antonio Pena Edreira, “Cholo”, un vecino de A Ribeira de 78 años al que se le perdió la pista el domingo, alrededor de las 12.00. La presencia de un helicóptero sobrevolando la ciudad, que aterrizó en los terrenos de O Carregal próximos a la piscina a media mañana, alarmó a los betanceiros que, nada más conocer el motivo de su desplazamiento al municipio, se volcaron con el operativo, a través de las  redes sociales y ofreciéndose como voluntarios para sumarse al rastreo, que dirigen desde el instituto armado y en el que también participaron de manera activa los perros de rescarte de la Asociación Casaga, que la semana pasada también estuvieron en Curtis en el operativo para dar con el octogenerario de Fisteus. 
Según los servicios de emergencia, el hijo de “Cholo” dio el aviso al comprobar que su padre no había regresado a su casa de A Ribeira. En el momento de su desaparición vestía un pantalón oscuro y calzaba chanclas, y teniendo en cuenta la ubicación de su domicilio y los sitios a los que solía desplazarse, como una huerta en una de las orillas del río, en las inmediaciones del puente de la vía, el rastreo se centró en el entorno del Mandeo. 
Al cierre de esta edición, ninguno de los participantes en el operativo de busca, que se reaunudará esta mañana, habían dado con alguna pista que pueda conducir hasta “Cholo”. El hombre, que necesita medicación, llevaba barba de varios días y su aspecto era algo desaliñado “porque desde que quedó viudo no se cuidaba nada y mostraba síntomas de pérdida de memoria”, explica uno de los participantes en el dispositivo, a punto de retirarse para continuar hoy.
Los vecinos aseguraron que lo vieron el domingo por la mañana con una llave en la mano y buscando su coche que, de acuerdo con las informaciones que maneja la policía, hace meses que no tiene, aunque él insistía en encontrarlo aparcado en A Ribeira.  
Los agentes también se desplzaron hasta la parroquia de Santa María de Castro-Pontellas donde, al parecer, el desaparecido tenía una casa, pero nadie les abrió la puerta, por lo que decidieron continuar por otras áreas, como el propio cauce, para lo que se movilizó la zódiac de Protección Civill, que recorrió el Mandeo arriba y abajo, hasta el nacimiento de la ría de Betanzos. l