El túnel de La Marina se abrirá a la circulación a mediados de mayo

Era un secreto a voces, y ayer el alcalde lo confirmó: el túnel de La Marina no estará listo hasta dentro de quince días, cuando esperan “un avance importante”. El objetivo del Ayuntamiento ea que se abriera antes de que acabara el mes, pero las circunstancias lo han hecho imposible, a pesar del interés del gobierno de Negreira en finalizar una infraestructura que no ha estado exenta de polémica en pleno período electoral. “Tengo ganas de acabar esas obras –reconoció el primer edil– pero es una obra difícil, complicada, de una envergadura importante”.
El propio Negreira no las tiene todas consigo, y matizó que “una semana más o menos” no tiene importancia cuando se habla de una obra que se empezó a proyectar en 1992. “Creo que va a merecer la pena, lo que ocurre es que los últimos días son los que tardan más en pasar”, comentó el primer edil, en referencia a los embotellamientos que se registró en la zona después de que se . Y recordó oportunamente que se esperó seis años para tapar “el agujero de O Parrote” y que fue bajo su administración que se solucionó el problema creado durante el gobierno socialista.
La razón de que se haya dilatado el momento de la apertura es que, a pesar de que los obreros trabajan día y noche, todavía queda mucho que hacer, sobre todo en lo que se refiere a las medidas de seguridad que permitirán que sea legal abrir el túnel al tráfico. Desde la Autoridad Portuaria señalan, que, aunque al estructura ya está acabada, todavía hay que añadir los elementos de seguridad vial, como la instalación y pintado de las señales de tráfico.
Pero, además, hay que poner a punto el plan de autoprotección y de explotación, que tendrá que ser aprobado antes de que se pueda circular por la zona. Los ingenieros también tienen que instalar el sistema electrónico del túnel, incluidos las cámaras de vigilancia que se conectarán con la Policía Local, así como los radares que vigilarán los tramos más peligrosos.

un simulacro
A estas alturas, hace ya mucho tiempo que se desvaneció la posibilidad de un gran acto inaugural para el túnel, puesto que la cercanía de las elecciones lo impide. Sin embargo, si se celebrará un simulacro que servirá para poner a prueba tanto el plan de autoprotección como la respuesta de los servicios de emergencia en  el caso de que se dé un incidente en el túnel más grande que haya construido en A Coruña.
Una vez superadas estas pruebas, se abrirá el paso. Los expertos apuntan a que se hará un lunes o un martes, para que el tráfico se acostumbre a esta nueva arteria principal de la ciudad y de la que el alcalde insiste en que permitirá disfrutar mejor de la zona centro.