La empresa cumplió su palabra e ingresó ayer las nóminas a sus trabajadoras.
Carlos Calvelo recuerda a las empleadas que “fue un retraso”, además de afirmar que “cobraron enero y febrero a pesar de haber hecho menos horas”.
Mari Morales explica que la empresa “no ha regalado nada” y que esas horas se incluyen “en una bolsa de horas que las trabajadoras devuelven fuera de su jornada”. Por otra parte, señalan que están a la espera de que la empresa les confirme su asistencia a una reunión la semana que viene porque, apunta, “solo queremos hablar”.