El coruñés Jesús Paz estrenará el sábado en el centro Ágora su primera película

La historia transcurre desde la punta del Millenium hasta el ayuntamiento. Con tres casas por el medio, un perro y un coche enorme. Así la describe su director, Jesús Paz. El coruñés estrenará el sábado, a las 20.00 horas, en el Ágora su primera película “The Visit”, que parte de un “presupuesto cero” para ser intriga en 50 minutos. Para ello, la batuta se hizo con un elenco de diez actores no profesionales y cámaras prestadas y cuando fue capaz de juntarlo todo, golpeó su claqueta particular y le dio forma a la chuleta.

La trama de “The Visit” transcurre entre la punta del Millenium y el ayuntamiento

Así es que su guión le pidió situar a una mujer de profesión psicóloga como protagonista. El director adornó su vida con flores y un marido de nombre Cameron para colocar en medio de la trama una visita inesperada. La de una nueva clienta, encargada de hacerle revivir un trauma de su infancia. Y como decían en un programa muy famoso de la televisión, hasta aquí se puede leer porque Jesús prefiere no desvelar más detalles. Para que sea más grande el efecto del suspense.

Después de visionarla en el centro del Agra, el autor está orgulloso del trabajo realizado y solo espera que sea el primero de una larga lista. Para eso, hace una llamada a las productoras interesadas en historias que atrapen. Porque solo con ellas, podrá dar un paso más y contar con los medios adecuados para materializar la ficción. Que sale de su cabeza y se detiene ahora en otras posibles películas.

Con el mar de testigo y un plantel de intérpretes que nunca han pisado un plató de rodaje, Jesús asegura que el resultado es “superincreíble”. Lejos de presentar la intriga sin darle respuestas a la butaca, en “The Visit” están todas las incógnitas despejadas. Según Jesús, ninguna queda en el aire y al contrario que en otras cintas donde las historias se retuercen como serpientes de cascabel, su forma de escribir es sencilla.

proyectos

Con tan solo 29 años, el director dice que tiene muchos proyectos en la mente y otros tantos guardados en un cajón. Para darles algún día forma. Tras el estreno en el Ágora, lo siguiente será colgar su trabajo en las plataformas digitales para que todo el público que no pudo asistir a la exhibición del sábado, tenga la oportunidad de verlo. Y ubicar la acción bordeando el Atlántico para “encerrarse” durante casi una hora en una consulta privada. Justo en el momento en que un nuevo cliente llama a la puerta. Y cambia las coordenadas de sitio.