El Coliseum, sede taurina coruñesa

Los progres “antitodo” menean sus culos orondos, patean su rabia envidiosa y protestan porque no tienen aptitud ni capacidad para comprender sus “antitouradas”; cuando ciertamente se limitan a ser depredadores del toro de lidia intentando su exterminio junto al mamut y el uro, arrinconándolos en el museo de antigüedades... sin embargo, pese a tales inconvenientes, nuestro singular Coliseum ha abierto sus puertas a la feria taurina de María Pita 2013. Horario un tanto hereje con cita de espadas de tronío y elegancia y gallardía de caballos y yeguas haciendo quiebros ante el morlaco.
Pero a despecho de estos intolerantes, de confusos altruistas que lloran por animales nobles y combativos mientras miran para otro lado ante el aborto o la desesperanza infantil sometida a esclavitud y vejaciones, aquí se dibujan nuestros carámbanos de luna, los juncos, las varas de mimbre haciendo el paseillo por el redondel de arena –abrazado  por banderas nacionales y gallegas– en escenario de vida y muerte. En contra los negados de siempre, individuos con cerebro tan frágil y populista para edificar, como formidable explosivo para reventar.
Pasó ya un festejo. Hoy veremos el segundo y el domingo disfrutaremos del tercero. Con precios asequibles para acudir con alegría y emoción a la sede de la diócesis taurina coruñesa y contemplar la bella estampa de estas reses desde el pitón al rabo. Con el recuerdo de emular la Maestranza sevillana y sus maestros: “Cuatro torres andaluzas esculpidas por el genio./ Juan Belmonte, Joselito, Rafael Gallo. Hechicero./ Y un Manuel, Manuel Rodríguez “Manolete” ¡Qué toreros!/ Los cuatro grandes del toro, ¡Ay que pena de no verlos!/ Cartel de feria exclusivo del empresario del cielo.