Esto es la Navidad

La Navidad no es un tiempo más de vacaciones, ni la carrera por las compras y el gasto desbocado, ni las comidas de empresa, ni los grandes almacenes abarrotados... Ni siquiera la carrera entre ciudades y alcaldes a ver quién las ilumina más, con más decenas de miles de luces led y cada vez con menos símbolos religiosos. Eso es la superficialidad, lo que ve la mayoría de la gente. Pero la Navidad es otra cosa.

Navidad es el mensaje de Amor de un Dios hecho niño, un Dios entre los hombres, por y para los hombres, que se repite desde hace más de dos mil años y que sigue vivo, a pesar de la desacralización, de la secularización, de la constante ofensiva consumista que convierte todo en una lucha para ver quién tiene más, quién gasta más, quien consume más, quién se lo pasa mejor, olvidando a los que no tienen nada. La Navidad es un Mensaje de Amor, de acogida, de encuentro, de esperanza.

Navidad es el pesebre de Belén, con un niño rodeado solo por sus padres, por una mula y un buey, algunos pastores sorprendidos y por tres Reyes Magos. Un portal abierto, desnudo para una familia unida por el Amor.

Navidad es la entrega de miles y miles de misioneros y cooperantes en todo el mundo, lejos de su hogar, lejos de cualquier tipo de riqueza humana, que han elegido servir a los más débiles, a los más vulnerables para darles esperanza. Dispuestos a dar su vida por ellos y por una fe inmensa. Una inmensa familia.

Navidad es la esperanza de millones de migrantes, hombres, mujeres y niños, que huyen de la guerra, de la violencia, de los abusos, de la miseria, de la persecución y que esperan, como la familia de Belén, que alguien les dé cobijo, refugio, una oportunidad para una vida nueva. Dentro de nuestras cómodas casas hace calor, nos sobre la comida, hay regalos. Fuera, a la intemperie, hace mucho frío. Solo frío.

Navidad es la llegada del Dios que se entrega por nosotros, la herencia cristiana que ha construido la Europa y la España que tenemos. Un tiempo de familia, de acogida, de fe, de futuro.

Navidad es una llamada a cada uno de nosotros para que haga algo por los demás. Un requerimiento a los que gobiernan para que piensen en el bien común, en el bien de todos, sin sectarismos. Una invitación a la acogida de los más vulnerables. Un rechazo a cualquier injusticia. “Nuestra pereza, dice el Papa Francisco, es un pecado”. Nuestro silencio, también. Que el verdadero espíritu de la Navidad se extienda todo el año sobre todos nosotros. 

Esto es la Navidad

Te puede interesar