Cañete, ¿un poco pillete?

Lo que faltaba para el duro. Hace pocas lunas los socialistas registraron en el Congreso dos solicitudes de comparecencia con carácter urgente, para Sáenz de Santamaría y para Arias Cañete. Se pide que Cañete explique los intereses que tiene en una empresa que opera en la Bahía de Algeciras y en Gibraltar y que practica el “bunkering” que ahora el tal Cañete quiere prohibir. Cañete no participó en el Consejo de Ministros del 30 de Noviembre de 2012 ya que allí se votó el decreto que concedió especial protección (Zec) a la Bahía de Algeciras.
Cañete dejo que defendiese el proyecto el titular de Exteriores, Margallo. Y tampoco votó. La empresa de la que Cañete es accionista se llama Ducar y, según dice Rodriguez, portavoz socialista, “con ella, con la empresa, tiene Cañete una gran vinculación ahora y también antes de ser ministro”. He aquí las palabras de Soraya Rodríguez, con relación a Cañete: “El ministro Arias Cañete dijo a todos los españoles que la petrolera en la que tiene acciones e intereses económicos no trabaja en la Bahía de Gibraltar.
Eso se lo dijo a los españoles pero, ¿qué dijo en el Consejo de Ministros? ¿Qué le dijo la vicepresidenta cuando le comunicó que, por conflicto de intereses, no podría ni elevar la propuesta para que no se puedan realizar en esa zona ciertas actividades con las que parece que tiene muchos intereses?
Parece a todas luces que Cañete mintió. Hasta aquí, Soraya, sin quitar ni poner coma. La Zec supone que estén prohibidas las gasolineras flotantes, una actividad que lleva consigo un tremendo riesgo medioambiental.
Por su parte, la SER informó de que parte del combustible que la empresa almacena proviene o termina en gasolineras flotantes en Gibraltar. También la Soraya socialista denunció que su homónima pepera ocultó la abstención de Cañete en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros. Por tal razón, los socialistas reclaman que Soraya Sáenz de Santamaría comparezca en una sesión extraordinaria de la Comisión Constitucional.
Desde luego, el Gobierno no gana para follones y es verdad que si Rajoy monta un circo, le crecen los enanos