Unos tuits demoledores

PABLO “Viva la Gente” Iglesias, antes Pablo Manuel, está acostumbrado a lanzar la cibercaballería contra todo aquel que se le ocurra, pero no a que ocurra lo contrario: que la carga se dirija contra él. Pero el pobre aún está temblando; los cascos de los caballos todavía resuenan en su mente; se resiente de los sablazos que recibió en todo el cuerpo... la pobre Irene Montero no sabe qué remedios aplicarle, no se atreve ni a hacer manitas con él en el escaño por temor a hacerle daño con un simple roce. ¿Por qué está el pobre tan maltrecho? Porque otra vez se fue de guay y le dio por arremeter contra Amancio Ortega por su millonaria donación para la lucha contra el cáncer. ¡Hace falta ser bien tonto! ¡La que le cayó encima! Fue una auténtica escabechina; lo masacraron a tuits que lo ponían en ridículo. No tuvo ni siquiera el apoyo de Cassandra, que es de su bando y a quien parece que se le han encasquillado los dedos desde su affaire judicial. Pablito, o Pablo Manuel, sé más prudente, porfa.

Unos tuits demoledores

Te puede interesar