La histórica ignorancia de Espinar

EN vísperas de que Copenhague acogiese la Cumbre del Clima, ZP se despachó con una frase que hizo pensar a los asistentes que el cumio no serviría para nada: “La tierra no pertenece a nadie. Salvo al viento”. Aún se oye el eco de las carcajadas, aunque ha quedado algo solapado por las que ha provocado el novel especulador inmobiliario Ramón Espinar. “Común ha de ser la tierra, que vuelva común al pueblo lo que del pueblo saliera”. El podemita que tanto disfruta zampándose mariscadas barateiras por la Galiza ceive atribuyó esa sentencia a los comuneros de Castilla y la utilizó para conmemorar su levantamiento en Villalar. ¡Menudo zote! ¡Su ignorancia es histórica! La paternidad de la sentencia no corresponde ni a Bravo, ni Padilla, ni Maldonado, sino a Luis López Álvarez, que nació en 1930 y la escribió en 1972, es decir, 450 años después de la revuelta. Cuánto mejor le iría si se dedicase full time a la especulación inmobiliaria.

La histórica ignorancia de Espinar

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