CUATRO estudiantes japoneses que andan de erasmus por Italia se acercaron hasta Venecia, visitaron la plaza de San Marcos y se fueron a comer a un restaurante llamado Osteria da Luca. Se zamparon cuatro filetes, un plato de pescado frito y dos copas de vino tinto y les cobraron 1.134 euros –quizá el bar esté regentado por calabreses emigrados–. Los ojos rasgados de los japos se abrieron como platos: ¡Qué caros están los bistecs! Se fueron a la comisaría, pusieron una denuncia y al restaurante le ha caído una multa de 20.000 euros. A partir de ahora sí que van a subir los filetes para pagar la sanción. FOTO: osteria da luca | tripadvisor