VALENCIA es la tierra de las flores, de la luz y del amor, pero podría ser también la de la igualdad –legítima aspiración, por supuesto–, gracias a la Consejería de Educación, que está empeñada en que los cuartos de baño de los colegios públicos sean mixtos... Si ese es el único camino que se le ocurre al Gobierno de Ximo Puig para avanzar hacia la igualdad, aviados están los valencianos.