Dónde establecer los límites del humor

El problema de intentar poner límites al humor, o a una canción, es que, de repente, va la situación y se da la vuelta salpicándote. Esto es lo que le ha pasado al Partido Popular que retuiteó un vídeo del humorista Ignacio de la Puerta, en el que, al final, le pedía a los Reyes Magos, la muerte de Pedro Sánchez. Esto le ha servido al PSOE para remitir dicho tuit a la Fiscalía, con la intención de que investigue si hay detrás del mismo un delito. Como aquel concejal que bromeó sobre el holocausto, o el rapero que expresó su falta de afecto por España y su monarquía, ahora los populares se ven convertidos en villanos por ese vicio de muchos de tener el ratón flojo cuando se trata de colgar cosas en las redes sociales. Es evidente que el chiste en cuestión es cualquier cosa menos gracioso, pero resulta muy complicado establecer el límite de hasta dónde puede llegar la broma. De hecho, si somos estrictos, tendríamos que estar todos en la cárcel.

Dónde establecer los límites del humor

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