Unos chorizos bien caros

SÁBADO por la tarde; cielo despejado, buena temperatura, casi no hace viento... unos choricitos asados son un plan perfecto. Un vecino de Cruz de Outeiro, en el municipio lucense de Quiroga lo dispone todo para la merienda. Una chispa salta, prende en la hierba y ¡zas! arden 50 hectáreas. La Xunta despliega los equipos de extinción y le pasa al hombre el coste del operativo: 120.000 euros. ¡Cuánto mejor hubiese sido merendar un bocata de chóped!

 

Unos chorizos bien caros

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