Este verano se desató una convulsión en la prensa del corazón de medio mundo. Y todo porque a Marion Marechal Le Penn, miembro de la tercera generación de la fascista dinastía francesa, y a Vicenzo Sofo, ideólogo de la Liga Norte italiana, se les vio muy acaramelados a principios de julio. Un amor nacido en tiempos de populismo. Claro que esa relación es más lógica que la que en otros tiempos podrían haber mantenido Franco y la Pasionaria o Carrillo y Carmen Polo, que serían antinatura. No se sabe si el idilio continúa o no, pero Marion Marechal –quizá despechada si todo ha terminado, o quizá para matar el tiempo mientras su partenaire está en Italia– se ha metido en el mundo académico. Está al frente del Instituto de Ciencias Sociales, Económicas y Políticas, un centro de educación superior para “contrarrestar el dominio cultural de la izquierda en las universidades”. La matrícula cuesta 5.000 euros... barato, barato no es el carné de facha.