seguro que conocen a más de uno que al enterarse de que tiene anticuerpos del coronavirus mira por encima del hombro al resto de pobres mortales en peligro y hace bromas con su superpoder: puede tocar, besar y rozarse sin peligro de caer enfermo. Seguro que también conocen a alguno que ha comentado más de una vez que quiere contagiarse lo antes posible para quedar inmunizado. Todos ellos se equivocan. Estudios científicos chinos –ellos son la referencia– y estadounidenses aseguran que los anticuerpos que desarrolla el cuerpo humano contra el virus pueden durar solo dos o tres meses, por lo que la inmunidad podría no tener efecto a largo plazo. Adiós a la inmunidad de rebaño y ojo con los contagios de repetición en los que ahora se creen invulnerables. Entre las muchas cosas de que no conocemos están las consecuencias de haber tenido el bicho dentro.