Cuando uno es joven y sale de fiesta, la noche a veces se le hace corta y tiene que buscar eso que siempre se ha llamado after para alargar la juerga. Y, claro, a los animalitos que pululan por la ciudad también se les hace corta la noche. Que se lo digan a la piara de jabalíes que hozaba en Los Rosales ayer y que se encontró un joven coruñés cuando volvía de fiesta.
