A dos de cada tres alumnos no les gusta la comida del comedor del colegio. Dicen que sabe todo igual, que no se sirve a la temperatura adecuada y que las raciones son escasas. Habría que estudiar con detalle la procedencia de las notas negativas, porque ni la primera apreciación, ni desde luego la última, encajan con la cultura gastronómica de Galicia.
