PRESENTACIÓN DE LA REVISTA DISPARART

El pasado 29 de julio se presentaba en  Monty4 Ambigú el número cero de la revista DisparArt, un proyecto nacido en marzo de 2014, merced al entusiasmo de Carlota Cuesta, Encarnación Pisonero, Ángel Aragonés y Charo del Rincón, de la galería Ra del Rey y que cuenta además con la colaboración desinteresada de otros artistas de la galería. 
El acogedor marco de Monty, donde el público puede sentarse en mesas pintadas por creadores coruñeses y estar rodeado de arte mural, mientras disfruta de una cerveza o de un café, era adecuado al desinhibido y rompedor espíritu de la revista, cuya declaración de principios es precisamente salirse de los marcos habituales de difusión de la cultura y de recuperar, en la medida de lo posible, el espíritu de las vanguardias; pues su andadura pretende ser polimorfa, libre, abierta; por eso arranca sin ortodoxias, ajena a clasificaciones que encasillen y descreída de los “emergentes”, “postmodernos”, “maestros” o “los de moda”. 
Y, precisamente, si la revista se llama DisparArt es porque,  busca  lo diferente, lo dispar, pero juega también con la idea de “disparar” arte, e incluso, con la acepción de disparate. ¿O acaso muchas de las cosas que hoy damos por ciertas y que vemos con naturalidad no fueron consideradas  como disparates en su momento? Todo esto lo destacaba la poeta Encarnación Pisonero en la presentación, haciendo hincapié en la utopía y la fe en la creación humana como motor de todo lo noble, lo bueno y lo bello de que podemos disfrutar. En lo mismo abunda el manifiesto, con el cual se abre la revista ( que es de nuestra autoría) y que también leímos en la presentación. Ahí explicamos  que el artista de lo dispar es un explorador, un buscador, alguien que ama situarse en el límite, en la frontera, el que sueña con un arte que cree espacios, que arrastre la imaginación, que sea celebración, puerta, apertura, epifanía; un arte que tenga olor, sabor, audacia, embrujo, que busque la savia, la raíz,  que se adentre en lo desconocido como lo haría un niño, con asombro.
  Los 50  artistas, poetas, escritores y profesionales de diversos campos que colaboraron con este nº 0 dan fe, de un modo u otro de este espíritu, pues abren ventanas,  musicalizan rostros,  elevan al espacio llamas azules,  hacen florecer árboles secos,  ofrecen proyectos de arquitecturas imposibles, buscan la coincidencia de los opuestos . En suma, han disparado sus dardos dispares, sus dardos de “disparate” y, para ser la primera vez, casi han dado en el blanco.

PRESENTACIÓN DE LA REVISTA DISPARART

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